Consumo de los hogares disminuirá en el primer trimestre del 2022

Una contracción en el gasto de las familias durante el primer trimestre será el resultado de la incertidumbre que se generará a partir de las elecciones nacionales, la amenaza de un alza en el tipo de cambio y las tasas de interés.

Lea más: Consumo de los hogares y producción del país sufren estrepitosos desplomes

El pesimismo se mantendría si se da una segunda ronda electoral en febrero, tal y como, se anticipa en las encuestas, según varios analistas económicos consultados por LA REPÚBLICA.

La colocación de la deuda interna, la recuperación en Estados Unidos y lo que suceda con los proyectos del Fondo Monetario Internacional (FMI) son otros de los factores que generan incertidumbre en los costarricenses a la hora de comprar.

El alza en las tasas de interés se avecina, luego de que el Banco Central variara al final del año, la tasa de política monetaria.

“La llamada Cuesta de Enero, que se da por los pagos en diciembre del marchamo y de impuestos, así como los gastos propios de las fiestas y la entrada a clases afectarán el consumo de las familias. También, algunos sectores de la economía, esperarán qué pasará en las elecciones para hacer sus compras o inversiones como es el caso de construcción, automóvil o inmobiliario. El tipo de cambio es otro termómetro que podría afectar las decisiones de consumo que volvería a seguir su tendencia al alza”, aseguró Daniel Suchar, analista financiero.

Lea más: Menor capacidad de compra e incertidumbre económica estancan el consumo

Los patrones de consumo cambiaron con la llegada de la pandemia y los hogares dejaron de comprar artículos duraderos o discrecionales y se concentraron en los de primera necesidad.

Comprar casa se visualiza como una mala idea para un 73% de los costarricenses, al igual que adquirir un carro que es una pésima opción para el 81%, según la última encuesta de confianza del consumidor realizada por la Universidad de Costa Rica.

“La Covid-19 disminuyó la capacidad de realizar gastos discrecionales en noviembre, al caer a 21,3% de las familias, mientras que en febrero del 2020 rondaba el 33,6%”, aseguró Johnny Madrigal, investigador de la UCR.

El número de productos que aumentó de precio viene subiendo y eso contrae más el gasto, producto de la crisis en la cadena de abastecimiento, situación que se seguirá reportando el resto del año en los precios de los bienes finales.

Si el costo de la vida es más elevado, las personas tendrán menor capacidad adquisitiva y reducirán su consumo, esto genera una cadena negativa que termina afectando a los negocios y al empleo.

Los niveles de inflación actuales no se experimentaban desde el 2014 y esto se debe al aumento de costos de bienes importados, aumento del costo de fletes marítimos y depreciación del colón.

Contabilizar cuáles son sus ingresos y gastos y contar con una buena salud financiera le permitirá minimizar todos esos factores de incertidumbre.

“Trate de ajustarse a un presupuesto, ahorrar en función de sus deudas en colones o en dólares para bajar la presión en sus flujos de caja familiares y disminuya en los gastos fijos como el costo de los servicios públicos, pero también en los discrecionales”, destacó Ernesto Hip, director de la carrera de Administración de Negocios de Universidad Fidélitas.