Modernización de Parques Nacionales se lograría con fideicomiso de ¢60 mil millones

Los recortes presupuestarios al Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) han dejado sin ¢17 mil millones al organismo, provocando una reducción considerable en la inversión destinada a las Áreas Silvestres Protegidas (ASP).

Esto impacta de forma negativa ya que los Parques Nacionales son zonas fundamentales para el país, debido a los encadenamientos productivos que se generan en las comunidades a través de la llegada de turistas, así como la protección y conservación de las especies de flora y fauna en todo el territorio nacional.

Por este motivo, las autoridades del Sinac trabajan en una serie de herramientas que permitirían inyectar más recursos a las áreas protegidas, entre ellos un fideicomiso para agilizar la entrega de dineros y atender con mayor rapidez las necesidades de los Parques Nacionales.

“Con el fideicomiso todo ese tipo de trabas se vienen a disminuir y se viene a facilitar la inversión, se hace muy de la mano con Hacienda y con la Contraloría General de la República. Pretenderíamos que fuera un fideicomiso cercano a los ¢60 mil millones, con plazo, estamos previendo que pueda tener unos 20 años de vigencia”, indicó Rafael Gutiérrez, director Ejecutivo del Sinac.

Esto está relacionado con la propuesta de ley que impulsa el Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) para eliminar la burocracia de la institución y los cuellos de botella que atrasan proyectos de mejora en las áreas protegidas.

Otra de las medidas para paliar la falta de recursos es la solicitud de un presupuesto extraordinario a los diputados entre los ¢1.500 millones y ¢2 mil millones, para atender carencias en infraestructura, combustible, reparación de vehículos, entre otros.

La llegada de nuevos recursos permitiría al Sinac modernizar los Parques Nacionales, con la intención de llevar mejores opciones de Internet a zonas remotas del país, garantizando una mejor experiencia a los visitantes y fortaleciendo las labores de investigación que se realizan en áreas protegidas.

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“Uno de los primeros temas que tenemos que resolver es la accesibilidad tecnológica, tenemos que llevar el Internet hasta los diferentes Parques Nacionales, que tenga la fortaleza para poder trabajar, en esa línea las inversiones son enormes. Ahorita estamos en un sondeo de mercado para ver empresas que tengan Internet satelital para llevarlo a sitios muy remotos, parte del presupuesto adicional solicitado va en esa línea, para tener recursos y darle accesibilidad a los diferentes sitios”, agregó Gutiérrez.

Aplicaciones y nuevas opciones de servicios en línea para los usuarios, son parte de las propuestas de la entidad para modernizar la interacción de las personas con los Parques Nacionales.

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Por otra parte, debido a que la falta de recursos imposibilita la creación de nuevas áreas protegidas, el Sinac trabajará dos opciones para seguir resguardando la flora y fauna del país.

La primera es impulsar la categoría de monumento nacional, que se trabaja de manera conjunta con las municipalidades para cuidar terrenos urbanos y proteger nacientes de agua.

La segunda opción es un proyecto que se presentará a los diputados para crear una nueva categoría de manejo llamada paisaje nacional, que también se trabajaría con los municipios para sitios que tengan características de belleza escénica; la propuesta se ha trabajado con el Instituto Costarricense de Turismo (ICT).

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En cuanto a la posición del gobierno de impulsar el desarrollo económico de una manera sostenible con el ambiente, el Sinac plantea que los servicios no esenciales de los Parques Nacionales pueden generar recursos a las comunidades aledañas, así como nuevas oportunidades de trabajo.

Por este motivo, en Parques Nacionales como el Poás, Irazú y Turrialba se han entregado servicios no esenciales a las comunidades y se espera que otras diez áreas protegidas puedan hacerlo en corto plazo, según Gutiérrez.

Todas estas propuestas tienen la intención de hacerle frente a las carencias que tienen los Parques Nacionales por los recortes sufridos desde 2020 y por la disminución de ingresos provocados por la baja visitación causada por la pandemia; además de modernizar las áreas protegidas para brindar una mejor experiencia a los turistas nacionales y extranjeros.