Mujeres dominan los puestos de investigación y desarrollo de biotecnología

Las mujeres dominan la incipiente industria de la investigación y desarrollo en biotecnología, al ocupar el 60% de los cargos en esta área, de un total de 1.548 empleos.

Justamente la investigación y el desarrollo representa el 22% de los 6.800 puestos que hay en el campo de la biotecnología, según un estudio de mercado elaborado por la Promotora de Comercio Exterior.

Por su parte, desempeñan el 49% de los puestos globales de la industria de la biotecnología, considerando todas las áreas.

Estas son buenas noticias tomando en cuenta que las mujeres son las más afectadas con el alto desempleo que afecta al país.

La semana anterior trascendió que el 26% de la población femenina está desocupada, cuando el promedio nacional se ubicó en 20,1%.

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Así las cosas, la biotecnología se abre como un espacio donde las mujeres pueden encontrar empleo aún en tiempos de pandemia del Covid-19, dado que el sector viene mostrando un crecimiento en los últimos años.

“Nos permitimos hacer algunas recomendaciones para potenciar este sector, que puede ser clave para la reactivación de la economía nacional, así como gran apoyo para el posicionamiento del país en los mercados internacionales, al ser un sector intensivo en conocimiento”, comentó Marta Esquivel, directora de Inteligencia Comercial de Procomer.

Solo en 2018, dicha industria generó ganancias por $629 millones.

Y es que los ingresos del sector por empleo generado es aproximadamente tres veces la productividad promedio del resto de la economía, de acuerdo con Procomer.

Costa Rica cuenta con 42 centros de investigación, de los cuáles un 16% son afines a los sectores de salud y farmacia, ambos con margen de crecimiento, debido al esfuerzo país por encontrar su propio tratamiento para curar el Covid-19.

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Un alto porcentaje de las personas que trabajan en estos centros no son graduados universitarios (45%), por lo que no se requiere un alto nivel de especialización académica para acceder al mercado.

Por ahora, el reto que se tiene para hacer crecer al sector pasa por la simplificación de procesos de trabajo entre los centros de investigación y el sector privado, así como por lograr un mayor acceso a financiamiento.

También se hace necesario que los centros de investigación sumen acuerdos para el desarrollo de tecnologías con fines comerciales.

“La pandemia nos cambió la forma de hacer negocios; por eso ahora es vital contar con datos que nos permitan ver un panorama claro y, de esta forma, tomar decisiones inteligentes en términos de mercados potenciales, alianzas entre empresas e instituciones, financiamiento, entre otros”, expresó Dyalá Jiménez, ministra de Comercio Exterior.