Nuevas reglas para la generación distribuida, ¿en qué me beneficiarían?

Usted podrá generar energía solar en su propia casa o empresa con menos restricciones, de aprobarse un proyecto de ley y un reglamento de generación distribuida.

Las iniciativas buscan que no tenga que entregar el remanente de la energía que consume a la red eléctrica, sino almacenarla para consumo propio en una batería, entre otros beneficios.

Las empresas o particulares además podrán aprovechar plantas de generación solar que estén ubicadas lejos de sus sedes físicas, pagando una tarifa de transporte por esa energía, a través de medidores inteligentes.

Así que usted podrá instalar paneles en Guanacaste, que tiene una estación seca prolongada, para usar esa energía generada en alguna edificación de su propiedad en San José, con la salvedad de que no podrá vender esa energía a terceros.

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Actualmente, las únicas facultadas por ley para comercializar electricidad, son las empresas distribuidoras, además del Instituto Costarricense de Electricidad y sus filiales.

Un sistema de generación distribuida con interconexión, es el que usualmente tienen los propietarios de paneles solares, que producen su propia energía para consumo.

Esto quiere decir que el usuario tiene paneles, pero se conecta a la red eléctrica pública cuando así lo necesita.

La legislación nacional establece que, en un sistema de generación distribuida de este tipo, usted como usuario está obligado a comprar un 51% de la energía a la distribuidora y solo puede aprovechar un 49% de los excedentes que genere su sistema.

Con los cambios en el reglamento sobre generación distribuida, el usuario no tendrá más esta obligación, teniendo ahorros importantes en su factura eléctrica.

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De momento, tanto el reglamento como los proyectos de ley siguen en consulta.

Para avanzar, primero deben establecerse los costos de implementar a gran escala la generación distribuida, como el valor del sistema de distribución, los medidores, adecuación del circuito a esta tecnología y daños que puedan provocar a la red de distribución eléctrica, según un criterio emitido por el Ministerio de Economía.