Pandemia paralizó o atrasó la mitad de obras de construcción

Desde hace meses el sector construcción viene alertando de la crisis que lo envuelve, pero una reciente encuesta le puso cifras a la realidad que enfrentan las empresas relacionadas a la actividad.

Un 45% se vio obligada a paralizar o disminuir sus operaciones durante este año y un 27% considera que la situación política y económica del país genera inestabilidad e incertidumbre.

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Así lo mostró un estudio que analizó la situación que enfrentan 163 compañías relacionadas a la construcción, elaborado por la firma consultora Deloitte.

La pandemia del Covid-19 solo vino a hundir una situación con tendencia al declive desde dos años atrás por un coctel que incluye incertidumbre, una economía a la baja y el poco apoyo político para revertir la situación.

“En el peor de los casos, las empresas constructoras han tenido que suspender toda clase de proyectos y, por ende, reducir la generación de empleo”, lamenta la Cámara que agrupa al sector, en el marco del Congreso Nacional de la Construcción 2020.

Esta realidad ha obligado a las constructoras a reorganizarse para sobrevivir, dijo Esteban Acón, presidente de esa organización, basándose en los hallazgos del mismo estudio.

Y es que un 76% de las compañías tuvo que modificar su sistema de negocio para ser más eficiente con menos recursos, mejorar procesos y disminuir costos y un 57% recurrió a planes financieros.

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A su vez, un 38% buscó nuevos canales de comercialización y un 37% rediseñó sus productos o servicios; todo esto para mejorar sus organizaciones y buscar la eficiencia que les permita mantenerse en el mercado y tratar de conservar al personal.

En esa línea, el 51% de las organizaciones aseguró no haberles reducido las jornadas laborales a sus colaboradores.

“Somos un motor fundamental de la actividad económica del país e importante generador de empleo directo e indirecto, por el elevado poder de arrastre en otras actividades económicas vinculadas. Generamos oportunidades laborales para todos los niveles de ingreso y especialmente para los trabajadores más vulnerables”, destacó Acón.

Una vez más, Acón ruega al gobierno trabajar por la reactivación del sector. Desde inicios año, lo ha venido haciendo y de forma proactiva con la presentación de propuestas en pro de recobrar la confianza y caminar juntos a tratar de recuperar el terreno perdido.

Las demandas van desde postergar la entrada en vigencia de nuevos impuestos que terminarían de derrumbar al sector, hasta reformas sustanciales para la modernización de instituciones como Acueductos y Alcantarillados y SETENA para agilidad las gestiones.

“Otro punto en el que hemos sido categóricos es en que la obra pública debe continuar. Sabemos que la pandemia afectó aún más la ya crítica situación de las finanzas públicas, pero es imperativo que el gobierno logre distinguir la gran diferencia que existe entre los términos “gasto” e “inversión”, agregó Acón.