¿Por qué demorar con los escáneres?

Faltan muy pocos días para que venza el plazo que tiene el Ministerio de Hacienda para instalar los equipos tecnológicos (escáneres) que permitan la inspección de todas las mercancías que entren o salgan del país, según lo dispuesto en la Ley de Fortalecimiento de las Finanzas Públicas publicada en diciembre del 2018.

La normativa estableció un período de un año a partir de la entrada en vigencia de esta ley para la implementación de estos sistemas, pero al no haber dispuesto los pasos para su ejecución, la meta no va a cumplirse. Sin embargo, es necesario insistir en el tema porque carecer de escáneres en todos los puertos, aeropuertos y puestos fronterizos terrestres tiene implicaciones negativas para la reputación, la economía y la seguridad de nuestro país.

La implementación de estos equipos está acorde con la realidad del comercio mundial: casi el 90 por ciento de los productos manufacturados del mundo se mueven por contenedor. Adicionalmente, va de la mano con una resolución de nuestro principal socio comercial, Estados Unidos, denominada Iniciativa de Seguridad en Contenedores (CSI) y que promueve la revisión no intrusiva de estos medios de transporte.

Este tipo de inspección, que implica el reconocimiento de las mercancías sin necesidad de abrir el contenedor, debe ser coordinada por el Consejo Nacional de Facilitación del Comercio (Conafac), e implementada en los puestos de Tabillas (Los Chiles), Peñas Blancas (Guanacaste), Caldera (Puntarenas), Moín (Limón, que ya dispone de un escáner de APM), Paso Canoas, Sabalito (fronterizos con Panamá) y en los dos aeropuertos internacionales, Juan Santamaría y Daniel Oduber.

La instalación de escáneres es una de las claves en la lucha contra el narcotráfico. A pesar de los esfuerzos de las autoridades costarricenses (este 2019 han detectado nueve contenedores con 5.513 kg. de droga en Limón), entre el 17 de mayo y el 27 de agosto de este año fueron incautadas en el puerto de Róterdam, en Países Bajos, 4,6 toneladas de droga que salieron de Costa Rica.

Estos hallazgos dañan seriamente la imagen del país y potencialmente ponen las mercaderías costarricenses en la mira de las autoridades internacionales, lo cual provoca atrasos para que los productos nacionales lleguen a tiempo a sus mercados, con los inconvenientes que eso conlleva.

El uso de los escáneres aumentará la competitividad de Costa Rica mediante la modernización de los procesos comerciales y la atracción de la inversión extranjera. La instalación de estos dispositivos es muy útil en el combate contra la evasión y la elusión fiscal; además, en el ámbito de la seguridad reduce los riesgos del ingreso de productos contaminados, peligrosos o que atenten contra la salud de los costarricenses o el bienestar de los cultivos.

La tecnología no intrusiva reduce el tiempo de inspección, abarata los costos y la hace mucho más eficiente, ya que al incrementar la velocidad de la operación portuaria se reducen las mermas en la mercadería; de igual forma, disminuyen los costos asociados a la movilización de contenedores por inspección física y garantiza que la carga no sea movida o vuelta a consolidar.

La implementación de escáneres por sí sola no es la solución definitiva, pero es un paso que no podemos postergar.

Jonathan Prendas

Diputado

Nueva República