Tren eléctrico para toda la GAM va contrarreloj, pero a gran velocidad promete nuevo jerarca del Incofer

En vez de una sola línea de tren eléctrico entre Paraíso de Cartago y San José, el gobierno de Rodrigo Chaves planea ahora construir un tren eléctrico para toda la Gran Área Metropolitana (GAM).

El problema, es que a pocas semanas de cumplir un año en el cargo, la administración ya va en una carrera contra el tiempo.

La posibilidad de que los procesos burocráticos -estudios, permisos, préstamos y eventualmente concesiones – no avancen por la vía rápida, es algo que tiene en cuenta Álvaro Bermúdez, nuevo presidente del Incofer, quien se plantea la meta de tomar decisiones y llevar el proyecto a un punto de no retorno.

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Solo de esta manera, se podría garantizar que el nuevo presidente, a partir del 2026, no decida desechar todos los estudios realizados y arrancar desde cero, tal y como se ha hecho en el pasado.

“El reto que tenemos es cambiar el enfoque; es decir, cómo llevar el proyecto. Tenemos más de diez años hablando de este tema y en ese período, el Incofer ha actuado como una isla, separado del MOPT, por lo que no hay una buena integración con ese ministerio y otras dependencias del Estado. Eso lo vamos a cambiar. Ya no es valida la excusa de que vamos a hacer estudios de tres años, para que la siguiente administración avance”, dijo Bermúdez.

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Si Rodrigo Chaves no cumple con su promesa de habilitar un tren eléctrico, Costa Rica cumplirá casi 16 años analizando cómo construir y operar un tren.

Se trataría de una parálisis por análisis que sumaría cuatro administraciones como mínimo.

La idea de Bermúdez, es idear un transporte que sea a ras de piso, con menos pasos elevados y de una sola vía para atender la realidad fiscal del país.

De esta forma, la obra ya no costaría $1.550 millones como proyectó el anterior gobierno, sino mucho menos dinero.

“En este momento yo no tengo un monto específico, pero sí creo que será mucho más barato de lo que se indicó inicialmente ($1.550 millones). Podemos tener un tren adecuado con menos dinero y sí, podríamos hablar de un rango entre $800 y $1.200 millones, pero pienso que lo podemos bajar más aún. Hay que adaptarse a la situación fiscal del país, optimizar los recursos y meter ingeniería”, aseveró Bermúdez.

Pérdidas económicas para el país y para las economías familiares, mala calidad de vida, menor competitividad y en general un retraso enorme en el desarrollo si no se toman acciones pronto para modernizar y electrificar nuestro transporte, serán las consecuencias de nuevos atrasos, según Silvia Rojas, directora ejecutiva de la Asociación Costarricense de la Movilidad Eléctrica (Asomove).

Y es que el tiempo promedio que los costarricenses pasan metidos en una presa, les cuesta entre $3 mil y $5 mil al año, según un informe del Estado de la Nación dado a conocer en noviembre de 2018.

Hasta el momento, la falta de voluntad política y los intereses privados han evitado la modernización del transporte público en todas sus modalidades, incluido el tren, el cual, es considerado como un elemento fundamental a la hora de transformar la movilidad urbana.

El pasado 20 de julio el presidente Chaves anunció “el entierro de ese capricho” -según sus propias palabras – para referirse al plan de $1.550 millones que impulsó el gobierno de Carlos Alvarado.

Desde entonces, ha tratado de idear una nueva propuesta. Con la llegada del nuevo presidente ejecutivo del Incofer, arranca un nuevo plan.