110 años del BN: Un banco para sus clientes

Fernando Naranjo Villalobos

Economista y fue Gerente General del Banco Nacional entre 2010 y 2015

[email protected]

Próximamente el Banco Nacional de Costa Rica cumplirá 110 años de su fundación. Durante más de un siglo ha sido la institución financiera más importante del país. El papel que ha jugado el Banco ha sido trascendental para la gran transformación que nuestro país ha tenido durante este siglo.

De una economía rural donde la agricultura era prácticamente el único medio de subsistencia hemos pasado a una economía de servicios y más recientemente a la de producción de muchos productos de alta tecnología con un alto valor agregado. Sin duda, el Banco Nacional ha sido el pionero en muchísimos campos para lograr está gran transformación.

Me correspondió llegar a la Gerencia General del Banco el 1 de junio del 2010. Un nombramiento inesperado y un ofrecimiento que agradecí a la Junta Directiva de ese entonces. En mi agenda no estaba desempeñarme como banquero, sin embargo, acepté el reto a sabiendas de que había muchos temas de gran importancia para el futuro del país y problemas que era urgente resolver en la Institución.

Me correspondió liderar, en equipo con la Junta Directiva, el plan estratégico del Banco Nacional para los siguientes cinco años. Además, era urgente resolver muchos problemas que el BN venía arrastrando durante varios años. Además, tuve el honor de ser su gerente en la celebración de los primeros 100 años.

Cuando inicié mi labor me encontré con serios problemas como la sobreexposición y extensión más allá de lo que era sano en una institución con la trayectoria del BN. Se financiaron malos proyectos en la zona de Guanacaste, La Fortuna de San Carlos y muchos otros lugares. El Banco se había orientado a funciones que no eran propias de un banco estatal y era urgente abandonarlas.

Tiempos de cambio

Como Gerente General, me correspondió ser el líder de ese nuevo Banco Nacional que empezamos a forjar en el año 2010. Menciono algunos de los elementos de esa nueva estrategia.

Primero era necesario que el Banco entrara en un proceso de tecnificación y modernización para hacer frente a los grandes retos de los próximos años. No se escatimó esfuerzo en las inversiones que teníamos que hacer en ese campo. El segundo aspecto importante fue lanzar el Banco a los mercados internacionales. La institución, como la más grande del país, seguía enmarcando sus funciones casi exclusivamente en el territorio nacional. Es difícil concebir un banco, ante los retos de hoy, que no extendiera sus actividades fuera del país.

Manejamos, junto con otros colaboradores, la colocación de $1.000 millones en bonos en los mercados internacionales. Fue la emisión más grande que había hecho un banco en Centroamérica. Además, logramos que el Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) invirtiera una suma importante en deuda subordinada. Eso permitió obtener recursos a menores costos a los que existían en el país y ayudar con tasas de interés más bajas a importantes proyectos de desarrollo.

Cambiamos totalmente la estrategia de comercialización y especialmente el mercadeo del Banco. Quizás un detalle pequeño fue cambiar el logo que tenía muchas décadas de existencia por un logo que representaba modernidad y un renacer, plasmado en colores más refrescantes.

Hicimos un gran esfuerzo por enfatizar un campo que estaba abandonado en la Institución, que fue el financiamiento para las empresas medianas y grandes en sus proyectos de ampliación y modernización. La banca corporativa empezó a jugar un papel de gran relevancia en el desarrollo del país y especialmente, en el mejoramiento de las finanzas internas.

Creamos un programa novedoso de banca mujer que hoy en día se llama BN Mujer, financiando en condiciones muy especiales a las pequeñas y medianas empresarias que tenían emprendimientos muy valiosos. Esto permitió despertar cambios importantes en la banca respecto al papel fundamental que juegan las mujeres emprendedoras.

Un aspecto al cual también le pusimos un esfuerzo especial fue destacar, como el Banco más grande y de mayor peso en la vida nacional, el papel de estabilidad en el sector bancario nacional. Sin duda alguna el BN, junto con el Banco de Costa Rica, han jugado un rol sumamente importante en darle una estabilidad al sistema bancario que no existe en otras latitudes de nuestro continente.

110 años y nuevos retos

Hoy día, al cumplir 110 años de existencia, el Banco tiene que enfrentar nuevos retos y oportunidades. Tenemos una economía muy diferente a la que teníamos hace tan solo un par de décadas. El Banco debe seguir jugando un papel de la mayor trascendencia buscando el equilibrio entre el financiamiento a grandes proyectos e inversiones estratégicas, el apoyo a las pequeñas y medianas empresas, y ser un importante instrumento financiero para las familias costarricenses en programas de vivienda y otras prioridades de los hogares. Y, por sobre todo, mantener indicadores de solvencia bancaria que garanticen un desarrollo sano y estable.

Parte importante de este proceso de definición estratégica del BN radicó en la contratación de una empresa consultora de las más reconocidas en el mundo. Ese insumo fue vital para lograr los cambios que queríamos impulsar en la Institución. Lamentablemente, cuando vino el cambio de Junta Directiva disminuyó el interés en continuar con este proceso que era vital para la modernización y la transformación profunda del Banco.

Ahora más que nunca, el BN debe prepararse para enfrentar con éxito los retos de un siglo muy diferente a lo que vivió Costa Rica en el pasado. Ese es el gran desafío que tiene el Banco Nacional en los años venideros, y garantizar que la Institución se mantenga joven, moderna y especialmente dedicada a su razón de ser, que son los clientes.