El lado oculto del CAR: Bullying y falta de atención integral denunciados por una madre
Walter Herrera [email protected] | Miércoles 14 junio, 2023 08:30 a. m.
En el mundo del fútbol, el brillo de los equipos y las glorias alcanzadas pueden ocultar realidades que merecen ser expuestas. Tal es el caso del Centro de Alto Rendimiento (CAR) de la Liga Deportiva Alajuelense, una institución reconocida por su excelencia en el desarrollo de jóvenes talentos.
Sin embargo, detrás de su gran infraestructura y sus jugadores destacados, se esconden situaciones que exigen una mirada crítica y la búsqueda de mejoras.
Recientemente, Natalie Mejías Mora, madre de un niño que entrenaba en el CAR, compartió su experiencia y perspectivas sobre el funcionamiento interno de esta institución.
Ser parte del CAR implica sacrificios significativos para los padres. Desde correr en campeonatos hasta encargarse de la alimentación y los pasajes de los entrenadores, los costos y las responsabilidades recaen sobre ellos. Además, el sistema de selección de jugadores parece estar sesgado hacia aquellos que los entrenadores consideran talentosos, sin importar otros aspectos integrales de su desarrollo personal, según la madre.
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La existencia de situaciones de bullying entre los jugadores es otro tema delicado que Natalie destaca. Ha sido testigo de casos en los que los jugadores de categorías superiores han maltratado o hecho sentir mal a los más jóvenes. Además, ha presenciado a entrenadores burlándose de los jugadores y ha visto a niños abandonar el CAR por sentirse frustrados, estancados y menospreciados tanto por la institución como por sus entrenadores. Estas experiencias han llevado a Natalie a alejar a su hijo del equipo.
"Gracias a Dios mi hijo pudo ayudar en tres casos de compañeros de equipo en donde tuvo que expresar a los entrenadores que conversara con algún niño porque Lucca les preguntaba por qué no iban a entrenar y esos niños escribían frases como: 'yo no soy importante para ese equipo, no quiero volver a jugar fútbol, el profesor no me quiere, le estorbo' o frases de entrenadores como: 'usted cuántos puros se fumó que trae los ojos rojos. Y tal vez los traía así por haber pasado llorando", señaló.